EL RETRATO

El retrato es la descripción de una persona. Para que un retrato sea completo debe de incluir tanto los rasgos físicos de la persona como los de su carácter. Acabamos de comentar el cuento popular francés "La anciana astuta", vamos a imaginarla y describirla.

 Así era la anciana  

 La anciana era alta y robusta, toda una mujerona. Tenía unos ojos preciosos, de mirada penetrante y una piel morena, ya algo arrugada por el paso de los años. Su pelo era blanco y lo llevaba recogido en un moño, lo que le daba cierto aire señorial y autoritario. Vestía con gran secillez, aunque con mucho estilo y casi siempre de negro, lo cual le transmitía un extraño halo de misterio. Tenía un carácter fuerte y, a veces, podía parecer un tanto huraña, aunque en sus cara solía dibujarse a menudo una agradable y próxima sonrisa. Era una mujer inteligente y generosa, siempre estaba dispuesta a ayudar a los vecinos y en las situaciones difíciles todos buscaban su opinión y su consejo. Por eso todos las respetaban y admiraban tanto. 

 

Con esta tabla podéis iniciar vuestra descripción literaria de un personaje:

Rasgo físico	Descripción	¿Con qué se puede comparar?	¿Qué calificativos se pueden decir de ellos?
Ojos	Redondos y pequeños	botones	de camisa
Nariz	afilada	pellizco	agudo
Orejas	pequeñas	media luna antenas	creciente, menguante atentas
Cabeza	redonda	melón
Cabello	rubio	trigo cresta de gallo	seco puntiaguda

Piernas	cortas y delgadas	palillos
Pies	grandes	rebanadas de pan

Rasgos de la personalidad	Descripción	¿Con qué se puede comparar?	¿Qué calificativos se pueden decir de ellos?
Carácter	valiente, astuto	zorro, león
Ocupación	reportero	detective	avispado
Capacidad	inteligente	computadora	eficaz
...

Ahora se juntan los elementos del cuadro, en el orden que queramos para llegar a la siguiente descripción:

Es un chico de edad indeterminada. Tiene los ojos y la boca como botones de camisa, una mirada vivaz y su nariz es un gracioso pellizco. A ambos lados del pequeño melón que tiene por cabeza, presenta dos medias lunas que saben escuchar atentamente. Su cabello de trigo siempre va peinado con una puntiaguda cresta de gallo. Al final de sus piernas delgadas como palillos tiene unos pies como rebanadas de pan.

Reportero de oficio, unas veces zorro y otras león, es muy observador y astuto. Resuelve todos los misterios con la eficacia de una computadora.

¿Habéis adivinado de quién se trata?